Ascensores Tresa abre las puertas a un nuevo futuro
En los próximos meses, Ascensores Tresa vivirá uno de los momentos claves en su historia, con la inauguración de su nueva sede en el polígono de Lloreda. Una nueva fábrica más grande, moderna e innovadora; un total de 10.000 metros cuadrados en los que la empresa, con 37 años de historia, creará los ascensores del futuro.
La nueva sede será más eficiente, tanto a nivel medioambiental como productivo, y en ella se potenciará el departamento de I+D+i, un laboratorio creativo del que surgen nuevos modelos, realizados con las últimas tecnologías, que cuentan con mayores capacidades de carga y superiores velocidades de desplazamiento, una mayor eficiencia energética. Además, contará con un diseño muy especial realizado en colaboración con la Escuela de Artes de Oviedo y la Escuela Universitaria de Diseño, Innovación y Tecnología (ESNE).
Ascensores Tresa cuenta con distintos sellos y distinciones que garantizan que todo lo que sale de sus instalaciones gijonesas lleva el marchamo de la excelencia. Por ejemplo, a finales de 2019, la empresa fue una de las acreditadas con el certificado ISO 45001, un reconocimiento otorgado por el Instituto Asturiano de Prevención de Riesgos Laborales en colaboración con el Club Asturiano de Calidad. Y tan solo unos meses antes, la empresa obtuvo el certificado de calidad Aenor para empresas conservadoras de ascensores, o lo que es lo mismo, la Marca N. En España, solo cinco empresas atesoran este certificado, que garantiza la calidad en los servicios de mantenimiento de ascensores.
Si calidad es la fuerza principal que mueven los ascensores de Tresa, la innovación es la llave del futuro.
LA ENTIDAD
Fundada en 1983 como una pequeña empresa de mantenimiento de ascensores, solo el interés por mejorar, investigar, desarrollar nuevos productos, modernizarse o renovar su catálogo, ha podido llevar a esta compañía a estar presente en más de cincuenta países.